Hay varios materiales de los que puedes construir tu alberca, pero los más comunes en México son la alberca de fibra de vidrio y la alberca de concreto. Ambas tienen sus pros y contras y debes de pensar qué es lo mejor para ti.
Alberca de fibra de vidrio
Una alberca de fibra de vidrio ya tiene una forma predeterminada y puede representar un problema en trasladarla si es muy grande. Sin embargo es rápida de instalar, ya que sólo necesita una excavación a la medida y asentar bien el suelo y paredes donde se va a empotrar y en poco tiempo podrás disfrutar de tu alberca a un costo razonable.
Alberca de concreto
Este tipo de albercas lleva más ingeniería que las de fibra de vidrio y se puede hacer de cualquier forma y con terminados de cualquier tipo: forma, desnivel, terminados con azulejos, formas decorativas. Suelen ser más laboriosas pero es la más común en México.
Sea cual sea la alberca debes tomar en cuenta:
- Tamaño de la alberca
- Terminados que deseas darle
- Forma rectangular o irregular
- Tu presupuesto y tiempo en que quieres terminarla
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¿Cómo mantengo limpia mi alberca?
Una vez que terminaste tu alberca, hay que darle un mantenimiento semanal que es muy sencillo pero es muy importante hacerlo bien y no dejar pasar más días, para que el agua no se eche a perder y que siempre esté cristalina y libre de bacterias.
No tengo tiempo de hacerlo, ¿quién limpia mi alberca?
Contamos con un servicio de limpieza y mantenimiento de tu alberca y sistema de filtración. Limpieza mecánica de superficie, fondo, limpieza de suela y paredes, uso de químicos, verificación de PH, funcionamiento de filtros y sistema de filtrado y bombeo.
